Héroes muertos

Los héroes han muerto.
Tiempo ha quedaron los momentos en donde acérrimos y nobles hidalgos cabalgaban nuestras calles portando enseñas de gallardía y nobleza. ¿Ahora a qué podemos aspirar? ¿A convertirnos poco a poco en lo que la televisión haga de nosotros?
Por desgracia no será tan sencillo...

Hoy día se adora más a gentucilla que al hacer una gracieta se abre un hueco en nuestros corazones antes que a personas que realicen autenticas proezas. Criaturas y sanguijuelas mediaticas que no tienen otro sitio donde les aprecien más como la escena pública. Criaturas tales como Belén Esteban, una mujer que vive a base de tirar de la manta del populacho labriego que siente cierta compatibilidad con su chabacana (y casi nula) expresividad. ¿Por qué, oh lectores, la mayoría seguís más a una aberración contranatura como ella y no a Eduard Punset? Menciono a Punset como podría mencionar a otros tantos desconocidos pues considero la vida de un bombero de muchísimo más interés que la de cualquier asqueroso tertuliano de la tarde....
Ya no nos quedan héroes porque los hemos matado. Poco a poco hemos renunciado al ideal de una vida mejor y transformamos nuestr día a día en un techado de comodidades con nuestros móviles, nuestro adsl, nuestra TDT y cientos de mierdas más que no necesitamos ni para vivir.

En la calle la gente muere. No, no me refíero a los estratos sociales superiores, desde donde leereis esto probablemente sentados como yo en una cómoda silla; me refiero a la calle de verdad. A lo largo de mi corta e improductiva vida he visto prostitución, latrocinio y drogadicción en gran parte de la ciudad, cada persona cuenta una historia y casi todas son y serán tristes, sin embargo no veis las historias y los personajes porque estais demasiado ocupados, atrincherados en vuestras habitaciones y temiendo la calle como los hombres de las cavernas temían al trueno.
Ahora mismo podreis ver en las noticias asesinatos de género, pero no se os ocurrirá decirle a vuestra pareja que la quereis; vereis accidentes de tráfico, pero no se os ocurrirá bajar la velocidad de vuestros coches por no llegar tarde a trabajar; vereis corrupción política y no hareis nada.... Estais adormecidos tal y como Bradbury contó con su Fahrenheit 451.... Un día de estos os levantareis del sofá, os sacudireís vuestras escaras y os dareis cuenta de que existía un mundo fuera de vuestros hogares que ya no es tan maravilloso porque se ha ido a la mierda por vuestra ineptitud.

A estas alturas de la sociedad la vida se ha vuelto desagradecida. Hemos pasado por momentos de represión social y política hasta hace bien poquito y, en apenas 40 años, hemos transigido desde el celibato hasta el libertinaje. Ya no nos entra en nuestra mente una sociedad que no consienta la homosexualidad como un crimen, lo vemos en las noticias y pensamos que eso pasa en los países extremistas donde no existe libertad, y ¿sabeis qué? Teneis razón. Pero no por ello debeis olvidar que ha existido gente que ha muerto aquí mismo para que tú puedas elegir qué color de camisa llevarás hoy. Ya no te tienes que preocupar por si tu novia y tú estais demasiado acalorados y os empiezan a perseguir los grises por impudiencia y escándalo público.

Foto de los llamados grises en una manifestación a las puertas del gobierno de Santander en 1956

Conozco a bastantes gays y lesbianas, han sufrido bastante. Antaño salir del armario era algo que era imposible, no sólo por el qué dirán, sino por la ilegalidad de ser un "invertido". Hoy día se ha convertido en un divertido juego de rol para adolescentes. Conozco a demasiados gilipollas que para hacerse los modernos y los cool van de homosexuales, sin saber siquiera que eso no se elige. Al igual que a demasiadas calientabraguetas que se comportan como bisexuales pero no conciben la idea de estar enamorada de una mujer.
Algunas veces pienso que la sociedad se irá por un retrete acompañada de grandes erecciones y pezones duros...

Y esto es así porque lo habeis querido. Seguís a falsos profetas y no creeis en nadie que no haya salido por la tele o en la portada de una revista. Pregúntale a un niño cual es su ídolo y os contestará que algún futbolista del estilo de CR o el Kaká o el Messi o algo así. Pero no aspirarán a convertirse en ellos, sólo se conformarán en desearlo, soñar con ello... pero interiormente lo que queremos es que caigan y fracasen, porque, creedme, si algo nos gusta más que ver a un héroe, es ver cómo cae y se destruye por el camino. Ellos no serán perfectos, pero al menos lo intentan.

¿Qué has hecho tú últimamente que sea digno de mención? Sal de tu casa y abre los ojos, joder, el mundo sigue siendo una mierda y tú no estás seguro a solas con tu tele.

"El héroe nace de uno entre cien, el hombre sabio se encuentra entre un millar, pero un héroe sabio no se puede llegar a encontrar incluso en cien millares" - Platón